Organismos de la Unión Europea que evalúan los riesgos de la salud, han indicado en una conferencia de prensa su preocupación acerca de la audición de los jóvenes que utilizan el reproductor de MP3 en un volumen demasiado elevado. Si bien esta preocupación siempre existió, desde la creación del walkman, el auge de ventas de los reproductores de música (MP3, MP4, teléfonos móviles, y demás) ha puesto en alerta a científicos del mundo en búsqueda de una solución.
Según el estudio de la Unión Europea unos 10 millones de jóvenes de dicho continente estarían en peligro de perder la audición. El efecto que pueden causar estos reproductores es la pérdida de la audición y tinnitus: ruidos y zumbidos en los oídos. Asimismo, entre el 5 y el 10% de los usuarios de MP3 corren riesgo de pérdida permanente de la audición.
Estos efectos podrían llegar en un período de aproximadamente cinco años, para aquellas personas que durante este tiempo escuchen música en sus reproductores con un volumen elevado. Estos efectos fueron calificados como de “catástrofe” buscando que se realice algo rápido para revertir la situación.
Por el momento la única alternativa que se ha propuesto es que en las pantallas de los reproductores se indique con carteles el peligro al que se está alcanzando al subir el volumen, así como poner un límite en el volumen máximo que tengan estos reproductores.